Hace unos días tuve el placer de asistir al meetup de IVI sobre vitrificación de óvulos y preservación de la fertilidad. La verdad es que cuando la charla viene impartida por grandes profesionales, estupendas personas y es en petit comité y además con testimonios reales sobre el tema, se traduce en una charla espontánea y natural con la que se aprende muchísimo.
Fuente: www.ivi.es |
No es ningún secreto que las mujeres, hoy en día, retrasamos cada vez más el tener hijos por diversas cuestiones: por estudios, trabajo, búsqueda de una estabilidad económica, etc. Cada cual tiene sus motivos y los conoce mejor que nadie y, desde luego, no es algo criticable ni censurable. Si lo pensamos nunca es un buen momento para tener hijos porque siempre estamos a la expectativa de algo mejor. Al final cada una tiene que poner el corte y tomar la decisión que crea más oportuna.
Lo único que sí que es cierto y tiene base científica es que nuestra edad fértil va a la contra de nuestra vida y de nuestras prospecciones. Muchas veces, cuando ya nos planteamos en serio ser madres nos encontramos con problemas de fertilidad, con que nos cuesta quedarnos embarazadas de forma natural e, incluso, que tenemos que recurrir a sistemas de reproducción asistida para conseguirlo.
Fuente: www.ivi.es |
El hecho de ir en busca de un bebé que no llega es tremendamente duro, sobre todo a nivel emocional. Es un desgaste que solo conocen quienes pasan por ese proceso. Afortunamente existen grupos de apoyo como el grupo de apoyo Hello, capitaneado por la estupendísima Marian Cisterna, una chica tan cercana, tan cariñosa y tan transparente que a los 5 minutos de estar con ella sientes que la conoces hace años.
¿Podemos hacer algo para prevenir un problema de infertilidad en el futuro? Pues realmente sí. La solución tan sencilla es la vitrificación de óvulos o para que lo entendamos el común de los mortales, "congelar" con unas técnicas muy avanzadas los ovocitos pero de forma que no se creen cristales de hielo y se garantice la preservación con toda la calidad y seguridad. Las mujeres nacemos con un determinado número de óvulos que vamos perdiendo a lo largo de la vida, sobre todo a partir de los 35 años. Por esto mismo, lo ideal es que nos pongamos manos a la obra antes de los 35 años.
En un principio esta técnica se aplicaba a personas que iban a recibir tratamiento oncológico y así tener posibilidades de ser madre en el futuro a pesar de ese tratamiento. Lo cierto es que cada día hay más mujeres que toman la decisión de preservar sus óvulos cuando aún tienen una buena calidad y cantidad y así no temer por la incertidumbre futura.
No necesariamente tienes que usar esos óvulos que has tomado la decisión de vitrificar. A lo mejor luego tomas otras decisiones o a lo mejor no los necesitas pero el quedarnos tranquilas con unas altas garantías vale oro.
Con las clínicas IVI vais a poder resolver todas las dudas que os surjan, todas las inseguridades que se os planteen y, sobre todo, vais a ganar en tranquilidad para el futuro. E incluso, si estáis pensando en la donación de óvulos este es el mejor lugar que podríais elegir.
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