Si me llegan a decir que mi hijo, con dos añitos, iba a aprender los colores en inglés mejor que en castellano, y sin mediar papi y mami, no me lo hubiera creído. Y sin embargo, así es.
Este es el primer año que ha ido a la guarde y allí van poquito a poco aprendiendo los colores, afianzándolos. De hecho, me hizo gracia que en Navidades el niño saliera con un boletín de "notas", donde nos decían que teníamos que practicar más en casa, que el amarillo no lo controlaba bien. No es que no lo controle, es que ni se fija... Tú le preguntas ¿de qué color es esto? Y lo más seguro es que diga lo primero que le venga a la cabeza, como "tolo" (rojo, para que no busquéis en el traductor).
El bichito tiene la lengua muy suelta pero habla mal, para qué nos vamos a engañar, y a veces (muchas muchas veces) te devanas los sesos rebuscando en un pasado muy lejano un argot que ya no controlas y así descifrar lo que te quiere decir. Porque ojo cuidado no lo descifres, que el cabreo que coge el amigo es de flipar, en plan "mamá-es-que-no-te-enteras-de-ná".
Por eso, hace unos días, mi hijo de dejó asombrada. De pronto me señaló el portátil con su dedito y me dijo "mamá, esto bat". -¿El qué cariño?- "bat"- no te entiendo - "baaaaaaaaat". Totalmente descolocada con lo que me quería decir mi hijo, de pronto caí: ahhhhhh black- siiiiiiiiiiiiiiiiiii. Muchas pensarán, menuda tontería.... pero a mi me dejó alucinada. Y es que este aprendizaje nada tenía que ver con el cole, abuelos o en casa, venía de unos vídeos que le pongo en youtube de Busy Beavers, concretamente el Color Songs Collection.
En pocos días no sólo te dice todos los colores en inglés, es que encima le ha venido de refuerzo del aprendizaje en castellano. Así que si no conocíais este canal de youtube y lo probáis con los peques ya me contaréis el resultado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario